Estas son las claves que proponen de forma conjunta los ministerios de Sanidad y Educación para el inicio del curso escolar en septiembre.
La ministra de Educación, Isabel Celaá, ha anunciado este jueves un acuerdo con 14 puntos para el próximo curso escolar entre el Gobierno y las comunidades autónomas —excepto Madrid y Euskadi—. Con el acuerdo se establece que la vuelta al cole se producirá en septiembre como es habitual con la actividad presencial como «principio general».
En este documento también se recoge que se tendrán que cumplir 175 jornadas lectivas, con 20 alumnos máximo por clase y en el que se harán grupos estables hasta cuarto de Primaria para que los escolares guarden la distancia de seguridad.
Con este acuerdo, las comunidades autónomas asumen la elaboración de protocolos de actuación para garantizar la higiene, limpieza y el control sanitario en los centros. Un trabajo que realizarán junto a los servicios de prevención de riesgos laborales, y que incluirá medidas específicas para la atención de las personas incluidas en el grupo de riesgo.
Las comunidades también se encargarán de preparar los planes de contingencia ante las «eventualidades» que pueda provocar la evolución de la pandemia en el desarrollo del curso escolar, y tendrán que tomar «las medidas necesarias» para que los centros mantengan sus servicios de transporte y comedor escolar «en condiciones de seguridad». También recae en las comunidades autónomas, que tienen transferidas las competencias educativas, reducir la brecha digital y «limitar» sus consecuencias entre el alumnado, aunque el Ministerio colaborará en mejorar la «oferta de recursos para el refuerzo de la competencia digital» de profesores, familias y alumnos y pondrá en marcha, junto a las consejerías regionales, programas de cooperación territorial para «dar respuesta a la nueva situación».
Grupos estables reducidos y distancia de seguridad
Desde Infantil hasta cuarto curso de Primaria incluido, es decir, hasta los 10 años, se formarán grupos estables y reducidos de alumnado (a poder ser 15 niños y máximo 20) que no tendrán que guardar la distancia de seguridad de 1,5 metros ni llevar mascarilla a no ser que salgan a otra parte del centro. En quinto y sexto de Primaria, en Secundaria y en Bachillerato los alumnos tendrán que guardar entre ellos la separación de al menos 1,5 metros.
La mascarilla será obligatoria cuando no puedan mantener dicha distancia, pero no cuando estén sentados en el pupitre. El protocolo dice que la mascarilla «será de tipo higiénico y, siempre que sea posible, reutilizable» y los centros deberán servir de ellas a «el profesorado y para poder reponer las del alumnado, en caso de necesidad u olvido».
Medidas de higiene y priorizar espacios al aire libre
Los alumnos deberán seguir una higiene de manos frecuente y meticulosa, evitar tocarse la nariz, ojos y boca, y usar pañuelos desechables. Los centros deberán limpiarse al menos una vez al día y los aseos al menos tres veces diarias. La ventilación deberá ser frecuente y se mantendrán las ventanas abiertas el mayor tiempo posible cuando las condiciones meteorológicas lo permitan.
Además, los centros priorizarán la utilización de los espacios al aire libre para las actividades educativas y de ocio, en lugar de los cerrados y se procurará reducir al mínimo los desplazamientos de grupos de alumnos por el centro. También se podrán habilitar mamparas de material no poroso que compartimenten el espacio cerrado para que puedan compartirlo, por ejemplo, dos grupos de convivencia estable.
El documento de Educación y Sanidad recomienda que los centros organicen «en la medida de lo posible» actividades educativas al aire libre en vez de espacios cerrados, que tendrán que ventilarse con frecuencia y «durante al menos cinco minutos al inicio de la jornada, al finalizar y entre clases».